En los últimos años, el arte digital ha experimentado una transformación profunda con la llegada de nuevas tecnologías. Entre ellas, la inteligencia artificial (IA) ha irrumpido con fuerza, generando imágenes a partir de descripciones textuales, imitando estilos visuales e incluso creando obras “originales” sin intervención humana directa.
Como artista visual especializada en collage digital, me interesa especialmente reflexionar sobre cómo esta tecnología afecta nuestra práctica creativa. ¿Qué ocurre cuando una IA aprende de nuestras obras sin nuestro consentimiento? ¿Podemos proteger nuestro estilo personal? ¿Quién tiene los derechos sobre las imágenes que genera una máquina?
En este artículo, quiero hablarte sobre el vínculo entre los derechos de autor y el collage digital en la era de la IA. Exploraremos qué dice la ley, qué vacíos existen todavía, y qué podemos hacer quienes vivimos del arte para proteger nuestro trabajo y nuestra voz creativa en este nuevo panorama.
La IA no solo abre posibilidades técnicas, también plantea dilemas éticos y legales que no podemos ignorar. Y como artistas, no se trata solo de adaptarnos: también se trata de poner límites, exigir respeto por nuestra autoría y defender el alma humana del arte.
Sobre los derechos de autor en el collage
Si alguna vez me has preguntado sobre este tema, sabrás que suelo evitar dar opiniones personales demasiado tajantes. No porque no tenga una, sino porque los derechos de autor son un terreno delicado, lleno de matices legales que solo un abogado especializado puede interpretar con precisión. Cada caso tiene sus propias particularidades, y no hay una sola respuesta correcta que aplique a todos.
Lo que sí he hecho, con mucho cuidado, es recopilar y explicar lo que dice la ley y lo que está a nuestro alcance como artistas visuales. En especial, si trabajas con imágenes ajenas (como en el caso del collage), es fundamental saber qué se puede usar, qué no, y bajo qué condiciones.
Si te interesa profundizar más en este tema, te invito a leer algunos artículos que publiqué en mi web, donde explico todo de forma sencilla y accesible:
👉 Derechos de autor en el collage

La IA como herramienta creativa (y como “artista”)
En los últimos dos años, hemos visto cómo herramientas como DALL·E, Midjourney o Stable Diffusion han revolucionado la creación visual. Basta con escribir una frase —por ejemplo, “niña con sombrilla buscando al sol entre montañas surrealistas”— para que en segundos la inteligencia artificial genere una imagen totalmente nueva. Pero… ¿qué significa realmente que una IA “genere” una imagen?
¿Cómo lo hace?
Estas herramientas no “crean” desde cero, como lo haría un artista. Lo que hacen es analizar millones de imágenes existentes (muchas de ellas tomadas sin permiso de internet), extraer patrones, estilos, combinaciones visuales… y a partir de eso, generar una imagen estadísticamente coherente con lo que se le ha pedido.
Es un proceso técnico muy avanzado, sí, pero no es lo mismo que crear desde la experiencia, la emoción o la intención simbólica, como hacemos los artistas humanos.
¿Es arte lo que hace una IA?
Aquí entramos en terreno filosófico. Para algunos, si una imagen emociona o impacta, ya puede considerarse arte, sin importar quién o qué la haya creado. Para otros, el arte exige una intención humana detrás, un proceso de toma de decisiones conscientes, una historia personal, una narrativa, un lenguaje propio.
Desde esta perspectiva, la IA no sería una artista, sino una herramienta. Igual que el Photoshop o las tijeras en un collage: lo que importa es quién las usa y con qué propósito.

¿Quién es el autor de una imagen generada por IA?
Este punto es crucial y está generando mucho debate legal. En la mayoría de países, la ley no reconoce como autor a una inteligencia artificial, porque no tiene personalidad jurídica. Entonces, ¿quién es el dueño de la imagen?
- Si tú generas la imagen y la usas en un proyecto, puedes tener ciertos derechos sobre el resultado, pero no exclusivos ni plenos como en una obra original.
- Si la IA fue entrenada con obras de otros artistas sin permiso, se abre la pregunta: ¿es un plagio disfrazado?
- En algunos países (como EE. UU.), la Oficina de Copyright ha dejado claro que no se puede registrar como obra protegida algo creado íntegramente por IA, a menos que haya intervención humana significativa.
¿Pueden las IA aprender de nuestro estilo sin permiso?
Las inteligencias artificiales que generan imágenes no lo hacen desde la nada. Para poder crear, han sido entrenadas con enormes bases de datos (datasets) de imágenes recopiladas de internet: obras de arte, ilustraciones, fotografías, memes, diseños gráficos… y sí, también collages.
Muchas de esas imágenes han sido tomadas sin consentimiento, lo que ha generado protestas de artistas de todo el mundo. Al analizar millones de obras, la IA aprende patrones y estilos visuales que luego puede replicar. Y aunque no copia una imagen exacta, sí puede generar resultados que imitan el estilo de un artista específico, incluso si ese artista nunca dio permiso.
Esto ha llevado a que algunos artistas denuncien: “me están copiando sin preguntarme”. Y la verdad es que, legalmente, hay un vacío enorme. Las leyes actuales no exigen que los desarrolladores de IA pidan permiso para usar obras protegidas en sus entrenamientos.
¿Tenemos derechos sobre nuestro estilo?
Aquí es donde las cosas se complican aún más.
El estilo visual, como tal, no está protegido por derechos de autor. Puedes proteger una imagen concreta, una serie, una obra específica… pero no puedes evitar que alguien se “inspire” en tu forma de componer, tus colores, tu narrativa visual o tu estética general.
Esto significa que una IA puede replicar algo muy parecido a tu estilo sin estar infringiendo la ley, al menos por ahora. Y por eso muchos artistas estamos en alerta: porque, aunque el corazón de nuestro trabajo sigue siendo único, la tecnología puede imitarlo cada vez con más precisión.
Este tema da para abrir muchos hilos más:
💬 ¿Podemos exigir transparencia sobre cómo se entrenan las IA?
💬 ¿Debería existir un consentimiento previo obligatorio?
💬 ¿Qué alternativas tenemos para protegernos?
Como este tema me apasiona seguiré investigando más. Si tu tienes una opinión sobre el tema o estudio relacionado me encantaría conocer sobre él, escríbeme a hola@adrianabermudez.com
¿Qué podemos hacer como artistas del collage?
Aunque el panorama legal aún está lejos de protegernos completamente frente a la inteligencia artificial, sí hay acciones concretas y recursos que podemos usar para defender nuestra obra y nuestros derechos. Y no solo desde lo legal, también desde lo ético, lo comunitario y lo creativo.
Recursos legales y éticos disponibles
- Registra tus obras en entidades oficiales de propiedad intelectual. No impide que alguien las use sin permiso, pero sí te da una base legal más sólida si necesitas reclamar autoría.
- Licencia tus imágenes con Creative Commons u otras licencias personalizadas que especifiquen cómo puede (o no puede) usarse tu trabajo.
- Si detectas un uso indebido de tu obra, puedes enviar una notificación de retiro (DMCA) en plataformas como Instagram, Google o sitios web que estén reproduciendo tu trabajo sin permiso.
💡 Consejo: Consulta asociaciones de artistas o cooperativas locales que ofrecen asesoría legal accesible. En algunos países existen incluso defensores de derechos de autor especializados en artes visuales.
Cómo proteger tu obra online
- Marca tus imágenes con una firma o marca de agua (aunque sea discreta) para dejar clara la autoría.
- Publica tus obras en formatos de baja resolución si no quieres que se usen con fines comerciales sin tu consentimiento.
- Usa plataformas que apoyen los derechos de artistas, como Behance, que permite incluir licencias específicas, o servicios como Pixsy para rastrear usos no autorizados de tus imágenes.
Bonus: Algunos artistas están explorando soluciones como el blockchain o los NFT, no como forma de venta, sino como herramienta para registrar públicamente la autoría de una obra digital.
Iniciativas y movimientos artísticos en defensa de los creadores
- Spawning.ai es un colectivo que promueve el derecho a decidir si quieres que tu obra sea usada o no para entrenar IAs. Puedes registrarte y optar por excluir tu trabajo de sus datasets.
- Artists’ Rights Alliance y otras organizaciones están presionando por leyes más claras y justas para proteger el trabajo creativo frente al uso por IA.
- Existen también movimientos artísticos que están creando obras críticas, poéticas o activistas sobre el tema, defendiendo el valor de lo humano frente a lo automatizado.
En resumen: la tecnología avanza más rápido que las leyes, pero como artistas del collage podemos informarnos, protegernos y alzar la voz. La solución no es dejar de crear, sino crear con conciencia, con estrategia y con comunidad.
Reflexión final
La inteligencia artificial no va a desaparecer. Está aquí, avanzando cada día, aprendiendo de millones de imágenes —y sí, muchas veces también aprendiendo de nosotras, las artistas, sin pedir permiso.
La pregunta ya no es si debemos ignorarla o rechazarla por completo, sino cómo convivir con ella desde una postura ética y consciente. ¿Podemos usarla como herramienta sin que nos quite el lugar como creadoras? ¿Podemos poner límites, exigir transparencia y proteger lo que nos pertenece?
Yo creo que sí. Pero para lograrlo, necesitamos estar informados, unidos y despiertos. Necesitamos entender cómo funciona esta tecnología, cuestionar sus usos, y sobre todo, defender el valor único de la mirada humana.
Porque el collage, en el fondo, no es solo una técnica. Es una forma de ver el mundo. Es tomar fragmentos rotos y darles sentido, construir belleza con lo que parecía descartado, contar historias con capas de memoria y emoción. Eso no lo puede hacer una máquina.
La IA puede imitar formas, pero no puede copiar el alma. Y el alma del collage —esa intuición que mezcla, que duda, que busca— sigue siendo profundamente humana.
Fuentes bibliográficas
New York Times. (2023, enero 6). A.I. is learning from art, and artists are not happy about it. The New York Times.
Oficina de Copyright de Estados Unidos. (s.f.). Copyright and artificial intelligence. U.S. Copyright Office.
UNESCO. (2021). Artificial intelligence and the arts: Towards computational creativity.
WIPO – World Intellectual Property Organization. (s.f.). Copyright basics.
WIPO – World Intellectual Property Organization. (s.f.). Intellectual property and artificial intelligence.
Creative Commons. (s.f.). About the licenses.